Si está frito mucho mejor

Para ser feliz de verdad hay que freír fruta, la nevera a veces esconde piezas que si las miras muy de cerca las tirarías a la basura pero todavía tienen mucho que ofrecer, se han quedado allí solitas, detrás de esas uvas de las que te encaprichaste en la tienda cara hay un melocotón y dos ciruelas rojas arrugadas. Hay que echarlas a la sartén, así un poco mal cortadas, y con su piel, con una nuez de mantequilla y observarlas de cerca, se van caramelizando por su cuenta. El punto final lo da un poco de yogur.
Y la fruta frita llegó a mi menú diario. Y como dice la canción de Sabina, "apenas llegó se instaló para siempe en mi vida".
Mmmmmm... mi gostarrr mocho frrruta frrrita, voy a freírme un plátano para desayunar, en este día de fiesta.
ResponderEliminarPorque sí, y porque por fin ha llegado "el fresco" y ya está justificado guardar la ropa de verano, porque va a ser muy divertido helarse mientras pasan todos esos carros engalanados, llenos de señoras abrigadas con sus manteos y sus enaguas y sus medias de garbancillo.
Y comer morcilla, que en verano está un poquito contraindicada.
Voy a hacer foodshopping a la feria, y te compraré algunas cosicas.
Rebonica!